Nada más comenzar la campaña electoral, se empiezan a poner nerviosos los furibundos militantes de los distintos partidos. Votar al PSOE es de catetos, votar al PP de fachas, hacerlo por Ciudadanos es de oportunistas y por Podemos de dislocados. Votar a IU... bueno, en realidad parece que no mucha gente va a votar a IU.
Han perdido el respeto al que no piensa como ellos. Vale que respetan "de boquilla", pero en realidad no respetan a nadie. Yo tengo amigos que votan a distintos partidos. Puedo no estar de acuerdo con su manera de pensar en política, pero otras muchas cosas nos unen y una de ellas es el respeto por los que piensan de forma diferente. Con unos puedo hablar de política, con otros sé que no, pero nos respetamos. Creo que es una de las esencias de la democracia: el respeto al que no piensa como nosotros, al que no cree en lo que no nosotros (o no cree en nada), al que no es como nosotros, al que no vive como nosotros. Mofarse de los que son diferentes o piensan de forma distinta es de tiranos, de dictadores, de intolerantes.
Todos los partidos han hecho cosas buenas y cosas malas por el país. Cada uno ha hecho lo que le ha tocado en su momento. En todos hay corrupción, chorizos, delincuentes, gente buena y gente mala, personas honestas y trabajadoras y parásitos. Pretender vendernos que "mi partido" es el mejor y el más inmaculado es de necios.
Cada cual votará, según las circunstancias, a quien quiera, al que crea menos malo. Habrá voto "de piñón fijo" y voto simplemente prestado. Otros votarán en blanco o incluso pasarán. Todas las opciones son respetables, estemos o no de acuerdo con ellas, pero en este país canalla tendrán que pasar muchas generaciones para que lo aprendamos, tendrá que pasar mucho tiempo para que seamos unos verdaderos demócratas.
Comentarios